Contaminación Acústica
El ruido, es definido como un sonido excesivo y molesto, siendo el principal contaminante de las zonas urbanas y lugares turísticos, principalmente provocado por las actividades humanas, como por ejemplo el tráfico vehicular el cual corresponde aproximadamente al 80% del ruido producido en una ciudad, obras de construcción (10% del ruido), y locales de ocio (4% de ruido restante). Lo que puede causar problemas en la salud dañando la audición y pudiendo afectar el estado psicológico de las personas.

Los ruidos por encima de 80dB pueden desembocar en conductas agresivas y síntomas psiquiátricos, aunque la principal consecuencia es la pérdida de audición, presentándose tinnitus continúo (silbido en el oído), dolor, fatiga auditiva, distorsión de los sonidos. Siendo la principal causa de la pérdida auditiva la exposición laboral al ruido sin protección auditiva y actividades de ocio. Es importante mencionar que el ruido contino provoca que las células del oído interno se vayan destruyendo, siendo estas las responsables de la audición. La pérdida auditiva tiene como consecuencias, dificultad en las relaciones sociales, disminución del rendimiento académico y laboral, sentimientos de aislamientos y soledad. Es por ello que para evitarlo se recomienda:
- Evitar exposición a lugares ruidosos de manera prolongada.
- Proteger los oídos con protectores adecuados.
- Televisión a un volumen moderado.
- Al utilizar audífonos no superar el 60% del volumen máximo, y no exceder su uso por más de dos horas al día.
La Organización Mundial de la Salud, (OMS), ha declarado que el ruido tiene efectos para la salud tanto fisiológicos como psicológicos. La exposición prolongada al ruido, puede causar problemas médicos como hipertensión y enfermedades cardiacas. Dentro de los efectos adversos del ruido se pueden incluir: Cefaleas. dificultad para la comunicación oral y capacidad auditiva, perturbación del sueño y del descanso, estrés, fatiga, depresión, nerviosismo, entre otros.
Finalmente es importante mencionar que la exposición a niveles de sonidos menos de 70db no produce daño auditivo, independientemente de su duración. Pero cuando hay exposición durante más de 8 horas a niveles sonoros por encima de 85db es potencialmente peligroso.
La siguiente tabla resume los efectos sobre la salud y un nivel orientativo a partir del cual se pueden producir, según la OMS.

Por: Gloria Bueno